viernes, 15 de abril de 2011

EL MUNDO POLÍTICO, ECONÓMICO Y DIPLOMÁTICO – SIGLO XXI

EL MUNDO POLÍTICO, ECONÓMICO Y DIPLOMÁTICO – SIGLO XXI

Oscar B. Llanes Torres
Diplomático y Profesor Universitario Paraguayo


Todos sabemos de la antigüedad del Estado, como sujeto de derecho público, interno y externo, desde la más remota civilización que se tiene noticias, es de la época de las sociedades agrícolas de la Mesopotamia, conforme informa Fukuyama, asimismo la historia registra que China hace muchas civilizaciones que se remontan a más de diez mil años ha existido un Estado con una burocracia bien preparada.
En Europa los Estados modernos disponen de ejércitos, de un sistema tributario centralizado capaz de ejercer jurisdiccionalidad y representar poder competente en un territorio delimitado, hacen más de 500 años en la consolidación de las monarquías ESPAÑOLAS, FRANCESAS Y SUECAS, con la capacidad y potestad de generar orden, seguridad, leyes y derechos de propiedad. El poder político y financiero eran monopolios del Estado que con legitimidad la ejercía y los súbditos la reconocen, para evitar y enfrentar las causales naturales de conflictos internos y externos.
La tarea del Estado Moderno es domar, domesticar y hacer que el poder político trabaje por los propósitos que se consideran sustanciales por las personas a las que sirve y regular la acción del Estado de Derecho con un poder político soberano.
Los Estados Modernos se encuentran en muchas REGIONES DEL MUNDO ausente, débil e ineficaces, desde la época de la descolonización de América primero y África después, que con el fin de la segunda guerra se buscó la construcción de Estados que en algunos dio un buen resultado, en otros y en la mayoría fue un rotundo fracaso, el último Estado monopólico fue la Unión Soviética, que en algunos resultaron positivos y en otros una negación, igualmente todos conflictivos.
El problema de los Estados débiles y la necesidad de construir Estados, se inició hace muchos años, pero, realmente lo hicieron evidente y necesario los actos del 11 de septiembre. La pobreza, la ignorancia, el analfabetismo, la enfermedad no constituyen causas directas del terrorismo, pues, los atentados fueron obras de personajes de familia clase media elevada y su radicalización no tuvo origen en sus lugares de ancestros sino en Europa Occidental.
Debe llamarnos la atención para una oferta del mundo moderno que es muy atractiva, porque conjuga la prosperidad material de las economías de mercado con la libertad política y cultural de la democracia liberal (1), esta situación mueven a las migraciones a geografías más desarrolladas.
Ahora bien, no todas las sociedades consiguieron alcanzar prosperidad de las democracias occidentales, que en Asia oriental consiguieron un resultado favorable, habiendo llevado la transición con éxito a lo largo de estas dos últimas décadas.
Podemos afirmar sin titubeo que el Siglo XX está marcado por la controversia entre Estado grande y Estado pequeño, o fuerte y/o débil, el alcance de la actividad estatal no debe restringirse al poderío militar, como Gran Bretaña y Estados Unidos de Norteamérica, la necesidad imperiosa de la creación de impuestos que no existían en estos Estados es posible, como el de la renta y el combate a la pobreza y normas de seguridad alimentaria, el Estado después de la segunda guerra, tras vivir revoluciones, depresión el orden mundial liberal se derrumbó, apareciendo la nueva figura universal de las democracias participativas, solidarias y libertades responsables, surge en este nuevo tiempo las vigorosas sociedades civiles como agentes de cooperación y auxiliar vigilante de la transparencia en las gestiones gubernamentales.
Se superaron los éxitos de dictaduras posteriores a la segunda guerra, idealizada por Estados Unidos, un modelo de Estado defensor de la seguridad nacional contra el comunismo, que se diluyó en la década de los noventa del Siglo XX, surge la tercera ola de Huntington.
En este tiempo se exige una pregunta ¿Los Estados Unidos son Estados fuertes o débiles?, la explicación es simple, es un Estado fuerte, donde se impone la ley, el orden colectivo que prevalece sobre los partidos e intereses personales, las instituciones norteamericanas fueron diseñadas para limitar el poder del Estado, fortaleciendo la normatividad jurídica, la protección de los derechos humanos, la separación de poderes, el federalismo, estableciéndose desde 1776 una sociedad estatal de sólidos principios y respetos a las instituciones en una ambiente de conciencia jurídica colectiva.
Los grados de función del Estado solo se puede instaurar en un ambiente ético, donde no se permite fraude al Estado, respeto absoluto a las leyes en todos sus niveles, “la ley no se discute se obedece”, podemos criticar muchas funciones y carencias en materia de salud pública y solidaridad social, sin embargo, es admirable que la sociedad estadounidense está alerta y vigilante de su democracia y su posible disminución de un Estado en arma permanente como si fueran gendarmes del mundo, sería necesario que miren el retrovisor de la historia y verán cuanto tienen de culpabilidad por nuestro atraso y corrupción, el ejemplo es visible, permanente y constante.

San José, Costa Rica, 12 de abril de 2011


______________________________________________________________

Fuente: Francis Fukuyama – La Construcción del Estado

miércoles, 6 de abril de 2011

LA REVOLUCION DE 1964 - BRASIL

La revolución de 1964 – Brasil



Óscar B. Llanes Torres
Diplomático y Profesor Universitario Paraguayo

EEn las páginas ya amarillas de mis recuerdos encuentro con sorpresa esta fecha, 31 de marzo de 1964; Río de Janeiro esta hirviendo, los momentos políticos y sociales están muy agitados, existe en el ambiente tensión y rumores desencontrados, las Fuerzas Armadas están atentas, los estudiantes como nunca inquietos, los rumores circulan con exquisita rapidez, se está viviendo un clima de rara expectación, las fuerzas públicas movilizadas, se suceden los comunicados oficiales y sectoriales, los estudiantes se manifiestan preocupados, convocan para un encuentro extraordinario en la sede de la UNE, Unión Nacional de Estudiantes, la Facultad Nacional de Derecho, Universidad del Brasil, (así se llamaba en la época), líder de los movimientos sociales, dirigidos por la joven izquierda brasileña, cuestionadora y sensible a las demandas tanto de estudiantes como de los trabajadores, apoyan la revuelta de los marineros.

Los alumnos llegando a la Facultad Nacional de Derecho, el Centro Académico CANDIDO DE OLIVEIRA(CACO) repleto, todos nerviosos y agitados, 18 horas, los corredores llenos de estudiantes y profesores, las salas de clases ocupadas por dirigentes estudiantiles que convocan a la huelga, discursos inflamados contra la derecha, los brazos en alto, cabellos en desaliño, ojos saltones, sin fijar las miradas y gritos que se suman ocasionando al tradicional y solemne recinto, un aire de perturbadora inquietud, las horas se suceden y el día llegando a su fin, 22 horas, pocos alumnos se retiran, todos con la mirada puesta al edificio del Primer Ejército, sede del Ministerio de Ejército, Plaza de la República, llena de curiosos, vendedores ambulantes y trabajadores, la Central del Brasil, los trenes con su carga de gente tensa que reclama y circula bajo la mirada de soldados del ejército atentos y preocupados cumpliendo órdenes, policías civiles y militares, discursos de jóvenes estudiantes colgados de las rejas de hierro del añejo edificio de la Central del Brasil, insuflados y provocadores, exigiendo y condenando a la clase burguesa como responsable de la inflación galopante, la carestía de la vida, el desorden económico articulado para obtener más lucros, la clase liberal insensible a los requerimientos sociales, la indisciplina en el seno de la Marina de Guerra, la prensa al servicio de la clase burguesa distribuyendo panfletos contra los comunistas, agitadores al servicio de Moscú y Cuba.

CACO, como en sus mejores épocas, estudiantes de derecho en acción para combatir el presagio de un golpe de Estado, “el entierro de la democracia”, el fin de las libertades civiles y políticas, el libre pensamiento estará bajo censura, el día llega a su fin y las radios locales ya anunciando la caída de Joao Goulart, la salida política, se instaurará un régimen parlamentario en la nueva capital de la República, Brasilia, ahora si tendrá protagonismo.

El que suscribe esta nota, alumno de la Facultad Nacional de Derecho, juntamente con el resto del alumnado y profesores, sitiados por la ocupación de soldados del Ejército, decide solicitar al Director de la institución, Profesor Helio Gomes, que se comunicara a la Embajada y solicitar un transporte para el estudiante Oscar Llanes, funcionario de la Misión Diplomática que se encuentra sin poder salir de la Facultad, sitiada por las fuerzas de seguridad local y retrata al funcionario de la Embajada el momento tenso y muy peligroso que se vive, en algunos instantes llega un vehículo de la Embajada, que conduce un Sargento del Ejército Paraguayo, ayudante del Agregado Militar, uniformado para acompañar al estudiante en tan difícil transe, se estaciona en la entrada principal del edificio y en atropellado grupo de brasileños entra al vehículo bajo la mirada seca de los soldados sin saber cómo reaccionar ante ese momento, los grupos se suceden y el estudiante paraguayo sin poder salir, siempre dando la oportunidad a sus compañeros que abordan la camioneta para desplazarse hacia sus residencias, hasta que a las 03:00 AM del día 1º de abril de 1964 sale el último alumno y cuatro profesores, el edificio de la Facultad Nacional de Derecho queda en silencio, manteniendo su orgullo intacto, con la firme decisión de algunos compañeros de ya dirigirse a la Embajada en la condición de asilados…

Esta crónica fue registrada en novelas, teatros, mini series de la televisión bajo el nombre de “Años rebeldes” escrito por el colega Sergio Marqués, cita el incidente, pero omite la ayuda de la República del Paraguay en tan dramático momento.