viernes, 30 de junio de 2017

La OEA que queremos

En el umbral del siglo XXI nos deparamos que ciertas organizaciones multilaterales, sea regional o mundial, OEA – ONU, se encuentran en una fase de revisión, sus obsoletas visiones, sus anquilosadas dependencias, sus proyectos caducos, sus ausencias múltiples de observación en las propias entrañas, todos necesitamos de organismos renovados, vigorosos, que transmitan esperanzadores optimismos, que no vemos ni sentimos, internamente, las Cancillerías se mantienen desde hace siglos muy distantes de sus pueblos, hablan lenguajes que no comprenden, ubicados en pedestales que no permiten escuchar las demandas y mucho menos de verlas sensibles a las realidades del cotidiano devenir de la sociedad que la sustentan, ante este escenario poco halagador es perentoria la indagación que nos aguarda el futuro, existe intención regional y global de cambiar la mentalidad viciada de los dirigentes de los organismos señalados, se ve a lo lejos un horizonte nebuloso, salpicado de una llovizna de pesimismo, un abandono de los destinatarios de las gestiones que se presentan sin contenidos, sin continuidad, sin sustentabilidad, con un ropaje en desaliño y de maquillaje absurdamente elaborado, tentando esconder las arrugas de un rostro sin vigor y de mirada lánguida y cansina, esta figura no es lo que queremos ni deseamos, por lo tanto, estimulemos la sacudida de toda la estructura de los organismos de referencia y en especial de este continente moreno. La OEA se muestra hoy con ganas de cambiar, de buscar salidas, de motivar nuevas experiencias, sumar esfuerzos, el sujeto colectivo siente el peso de su propio infortunio, en la asunción del nuevo Secretario General LUIS ALMAGRO LEMES, presentó un programa de actividades que incita a la reflexión y ruega a los miembros acompañarlos en el desafío de un cambio necesario e impostergable, queremos todos una OEA activa, democrática, que desafía la realidad y buscar mejorarla, como está es insustentable, debemos crear conciencia de la necesidad de darle un sentido moderno, los ejes se anunciaron, con los objetivos de un desarrollo integral, de respeto mutuo, escenario para un dialogo permanente, y no como dice el padre Lucas, “ monólogo compartido”, la nueva visión jurídica y no política de los derechos humanos, el reiterativo fortalecimiento de la democracia, sin anunciar que modelo de democracia y no el simple gesto de sufragios con fechas marcadas y resultados con muchas dudas en cuanto a transparencia y honorabilidad de los propios observadores comprometidos con un modelo arcaico y poco confiable como es natural. Los miembros de la OEA claman, insisten, ruegan, imploran cambios, la OEA es importante para dejarla sola y distante, es instrumento natural para el desarrollo, la herramienta básica para consolidar la figura de los derechos humanos, su plena vigencia continental, incendiar el ánimo de los pueblos por una democracia solidaria, la promoción constante de que la persona humana es el foco central de sus objetivos, hoy somos apenas coadyuvantes del escenario regional, con una comisión de derechos humanos mal elaborada, digitada, de muy escasa credibilidad, ideologizada y hasta si se quiere llega a un punto de perversidad. Reafirmo la necesidad de mucho más acción de esta organización, ¿cómo alcanzarla?, dependerá del valor, del coraje, de firmeza y de ánimo fortalecido de sus miembros , que permita crear condiciones favorables para un sostenible crecimiento y desarrollo, anhelamos nuestra propia tecnología y políticas educativas para la realidad de sus miembros, conectarse con la región y el mundo , solidarios ante los problemas comunes y fomentar políticas de soluciones para el colectivo regional, queremos una OEA, activa, que grite, que exija , que reivindique, que demande más respeto a su imagen , a sus derechos, a su dignidad y su personalidad como sujeto de derecho público colectivo, luchar por la igualdad en un continente desigual en un marco de respeto a los derechos humanos inalienables y fundamentales, allí esta ligeramente la OEA que queremos. Desde Asunción – PARAGUAY. 30 de junio de 2015

martes, 27 de junio de 2017

Guardia Urbana

El tiempo de mal augurio, nublado el ambiente, los rumores se disparaban y la zozobra cubría y reinaba en la sociedad, era el mes de mayo de 1954, “golpe de Estado” quiebra de la Constitución Nacional vigente, en toda la República se sucedían los comentarios favorables y contrarios, los tradicionales partidos políticos enarbolaban sus posturas, las amenazas y las persecuciones eran el pan de cada día, desplazamientos de familias, de profesionales, de estudiantes, no había indiferentes, todos cargaban en el alma un desafío, un miedo, un temor, una esperanza, El Partido Colorado apoyaba al jefe del golpe, Alfredo Stroessner y su grupo derriba Don Federico Chávez, anciano caudillo de la agremiación partidaria del gobierno, en el interior de la República los mensajes llegaban tergiversados, llenos de sospechas y algunas realidades repletas de dudas, existía un fenómeno que causaba pánico en los miembros de colectividades locales, era el “comunismo” señalado como un movimiento “Sin Dios y Sin Patria” , las iglesias en sus templos ocupaban los púlpitos en enardecidas homilías contra el mal, contra el peligro, contra los malos paraguayos, que no respetaban a la madre y al padre, hermanos contra hermanos, el ateísmo se hará presente y las familia se dividirán, los grupos humanos de bien serán desarticulados y sus estructuras dañadas en sus propios cimientos, los valores sociales y morales de la sociedad serán marginados, tendremos en el país un modelo de Sodoma y Gomorra, afirmaba en forma vehemente el Padre Inocencio Ayala, con un auditorio de fieles con los ojos bien abiertos y cristalizados, la ciudad de Itá – Paraguay, amanecía cada día con noticias que circulaban con rapidez, siempre iniciaba en el Mercado Municipal, que se transmitía y en forma galopante por la vía de los comerciantes, los artesanos, y de buena gana los desocupados tenían una tarea, ser portador de noticias, de peligros, de promesas, habrá disciplina afirmaban, porque es la marca de los militares, los civiles se dividirán en adulones y detractores, el cronista del pueblo, Poeta Manuel Verón de Astrada comienza su lucha y su martirio, sus idas a las celdas de la Policía se tornaban ya frecuentes y muy habituales, los jóvenes estudiantes que se manifestaban por la única publicación, muy esporádica por cierto, “Comunidad Iteña” del vibrante y lúcido periodista Lelio Cáceres Marín y su hermano menor Isidro Cáceres Marín, se vencía el miedo, pues, los materiales y comentarios eran de la responsabilidad del Director del medio , el blanco era el Párroco ya citado, que a su vez fuera designado Capellán del Ejército con el rango de Coronel y todas sus canonjías y prebendas propios de un régimen castrense, Las noches estrelladas de la ciudad, su blanca y enorme luna llena, los espacios oscuros, las esquinas y lugares de esparcimientos vacíos, a las ocho de la noche solo el grupo de jóvenes desafiaban con su inquietud, un grupo de adultos sin rostro ni identidad circulaban armados y en silencio en grupo de tres, cuando surgía un inocente o incauto, desprevenido o valiente eran requeridos por los parapoliciales denominados “Guardia Urbana”, con poderes que no se sabe por quién fueran otorgados, circulaban por la ciudad provocando el pánico por la brutalidad y el anonimato, todos eran contrarios al régimen hasta probar lo contrario, los derechos individuales ya no se respetaban, la dictadura se imponía y la ciudad perdió el bullicio y la algarabía, por imposición del anónimo y silencioso instrumento de la dictadura, perversa y deshumana, reinaba la paz de las tumbas y se prometía la salvación eterna del monstruo llamado “comunismo”. LAMBARE - PARAGUAY, 27 de junio de 2017.-

martes, 20 de junio de 2017

Politica Banalizada

El mundo civilizado pierde el rumbo, tropieza, se devalúa, está mareado, tambalea el equilibrio comprometido , vivimos la época de la incertidumbre, nada es tranquilo en todas las geografías del planeta que sufre el terrible mal de la política en calidad de enferma, los síntomas son iguales, las recomendaciones de los especialistas no se obedecen, no necesitamos ser estudiosos del tema porque las manifestaciones y los que tratan de la “política” son catalogados como los primeros beneficiarios de la prostitución del ejercicio, son banales, son egoístas, no ven ni quieren ver los males de la sociedad, esta pasó a ser una molestia y cualquier idea de sanación del ” status”, no se inmutan de violar textos constitucionales, no me refiero a un sistema jurisdiccional especifico, existe en todos los cuadrantes, encontramos en el primer y tercer mundo nadie escapa del nefasto acontecimiento que daña la tradición, los nobles propósitos, las buenas acciones se enlodan y se multiplican, tienen seguidores y adulones. En esta parte del continente en algunos Estados se recuerdan fechas memorables, aniversarios de las Constituciones vigentes, que es la norma más vulnerable, sufre los embates de mayorías auto consideradas democráticas, donde el concepto del vocablo de democracia tiene característica absolutamente irresponsable, patológica, en víspera de terapia intensiva con ausencia de especialistas y patriotas que la traten, es lamentable el escenario, prosperan las suciedades en los baldíos intelectuales que nos gobiernan, la corrupción galopante es corcel vibrante, ya no se esconden las formas ni los conceptos, las ideas se adaptan y se sienten golpeadas en el cuadrilátero imaginario donde los protagonistas ya establecen resultados, el público que obtiene ventaja en las apuestas exponen su aviesa felicidad, cuando esta expresión debería ser un símbolo de logros colectivos plenos, que beneficien a la sociedad como un todo. Los que enfrentan a la mentira, a la duplicidad y al cinismo deben conservar sus principios y no dejarse intoxicar, la facilidad que se propaga la contaminación es asustadora, hagamos un muro imaginario contra los malos y amenazantes vientos de la usurpación de la legalidad y eliminar el oportunismo y la práctica perversa de uno de los medios creados para servir con honestidad, con transparencia y con virtuosa forma de hacer el bien común. Desde LAMBARE – PARAGUAY, 20 de junio de 2017

jueves, 15 de junio de 2017

Monumento al Consumo

El día de ayer liberado del reposo determinado por el galeno, acompaño un familiar al supermercado, como este paseo no es de la predilección de esparcimiento personal, acomodo la humanidad en un lugar en frente a las cajas registradoras, el movimiento es intenso, las filas ante cada altar es larga y sinuosa, dispongo la atención a los componentes de la fila, cada persona con su estilo, su figura, su atuendo, su perfil, su misterio, sus preguntas y sus curiosidades, es interesante observar estas personas, como esperando una hostia, concentrado y en silencio. Analizo a cada quien y la primera es una persona del sexo femenino de edad mas que la media, cabellera clara, ondulada, regordeta, vestida con rigor, usa anteojos de grado elevado, sus manos inquietas en las bolsas con los productos escogidos, habla en murmullo con el vecino, parece reclamar algún disgusto, la fila continua, sus pares de otras cajas también en silencio paso a paso sigue su inexorable destino, la señora observada habla con gestos a la cajera, parece que algo le molesta en serio, intimida al funcionario la acusaré con sus superiores, su indiferencia es irritante, reclama la lentitud de la tarea afirmando tener sus ocupaciones adicionales y que son naturales en una ama de casa, la cajera en silencio continua acomodando los productos, las demás personas de la fila manifiestan sus molestias disimuladamente, luego le dice el valor de la compras, nuestro personaje abre la enorme bolsa, y comienza la zambullida en el interior de la que es de cuero marrón, y la búsqueda continua hasta que al fin encuentra la tarjeta de crédito, entrega y espera, de repente la cajera informa, “señora, no tenemos sistema” y con furia afirma ¿y que es eso? , respondiendo con calma que no se puede realizar la operación y ahora ¿qué hago? , y esperar señora, en ese instante alguien sienta a mi lado y con autoridad de quien sabe dice, “este asunto de sistema es una historia para remarcar los productos” y este servidor le dice, no sé cómo funciona, no es de mi época, desconozco los reveces de la informática y el silencio vuelve a reinar, hasta que al fin el famoso sistema retorna y el bullicio se instala en el recinto, la normalidad se instaura y la alegría se extiende por todo el salón. El fin del paseo llega y la retirada es perentoria, salgo dejando atrás el monumento al consumo con las observaciones detalladas y prometo no regresar, siento cansancio y el stress domina. Desde LAMBARE – PARAGUAY, 15 de junio de 2017