martes, 27 de abril de 2021

La Responsabilidad

Es el compromiso que tiene la persona sobre el darse cuenta de la necesidad de ayudar con su experiencia a realizar su aporte para el presente y el futuro, así contribuir a conquistar los sueños de mucha gente que lucha por los mismos ideales. La mayor RESPONSABILIDAD que se tiene con la sociedad es sobre su educación que está en las manos de los padres, del hogar, que es la primera escuela de la vida, luego la del Maestro, que la presente fecha coincide con esta materia, es considerado ”valor de valores”. El elevado compromiso obliga ser coherente, de saber que los valores van unidos, de la mano como una significativa cadena, un muro que ayuda a construir el edificio del espíritu y de la civilización. La RESPONSABILIDAD de esconder lo que con tanto sacrificio y mucho dolor había costado a la existencia, es el mensaje que podría ayudar a terceros a servir como guía para ayudar encontrar el camino, el rumbo de su evolución. LA RESPONSABILIDAD conduce al peregrino del universo la búsqueda de la luz de la evolución, de las manos del Maestro, es el que despierta lo que deseas responsablemente un futuro pleno para tu familia, tu vecindad, tu comunidad, tu pueblo, tu patria, el planeta, en beneficio de quienes amas, para los que mañana vendrán porque eres comprometido con tus acciones y con tu ejemplo, es el hoy, el tiempo de festejar con el vino de la sabiduría en armonía común por voluntades encontradas. LA RESPONSABILIDAD y el MAESTRO son ingredientes del amor real , diferentes, todos buscamos el bien de los demás , de nosotros mismos y el progreso de la patria y del planeta. La concepción del vocablo acepta decisiones y asume la consecuencia de ellas, de sus actos no intencionados, solo buscan el bien común y que otras personas también hagan lo mismo. Lo opuesto es la negligencia y la irresponsabilidad son las que no se hacen cargo ni de las conductas ni las decisiones y de las consecuencias, pues, carecen del ejemplo y del guía.- LAMBARE, Paraguay, 27 04 de 2021

jueves, 15 de abril de 2021

Fortaleza Espiritual

La fortaleza es un don que nace en el interior de la persona, no viene de nadie, ni existe por disposición, por determinación de nadie, es unipersonal absoluto, es fruto del ejemplo, la educación en la familia, la instrucción escolar, es fruto de la voluntad propia, de ser una persona altruista, positiva, perseverante, quien no se doblegada, es de convicción firme, respeta la opinión de terceros, aprende de todos, es persona sobria, prudente, de buen humor, es chispeante en sus intervenciones, todo lo anterior se resume en la fortaleza espiritual del individuo – mujer o varón – escucha mucho y habla poco, es un ser superior en su entorno y fuera de ella, es buen amigo, porque además es tolerante y sincero.-

lunes, 12 de abril de 2021

Inconsciencia

INCONSCIENCIA, “es la cualidad de la persona que obra de forma irreflexiva e imprudente, o que no mide las consecuencias de sus actos ni el riesgo que comportan”, viene a la mente la expresión que antecede en virtud de la ausencia de consciencia en el comportamiento de las personas ante el peligro de contagio del maldito “coranavirus” , con su causal de desespero, impotencia, que representa carecer de este valor fundamental en el caso del mal común de la pandemia, que nos exige, reserva, prudencia, cuidados comunes y extremos, nadie está exento de contaminarse, niños y adultos, analfabetos y alfabetizados, mujeres y varones, es pasible de contagiarse el que va y el que viene, miembros del núcleo familiar y cualquiera del entorno social, ni el quedarse en casa o movilizarse con ciertos cuidados te hace exento de contagio, es terrible el fenómeno que se está viviendo, tomar una decisión firme, una postura severa en el seno familiar tampoco funciona, solo se consigue desagrado y rebeldía, es hora de tomar la medida pertinente en forma rígida sin concesiones, retornar al valor CONSCIENCIA, o sea ser capaz de pensar en sí y en los otros, capaz de pensar en las consecuencias para sí mismo y la familia, la vecindad, los compañeros de trabajo, en las actividades comerciales, en las tareas simples, en la convivencia en el hogar, todos somos pasibles de recepcionar y alojar el virus, que nos invade y arrasa silenciosamente , llevando dolor y pobreza a las familias por la inconsciencia de terceros imprudentes, los carentes de información y la voluntad incontrolable de causar mal a sus semejantes, para ellos el repudio de la sociedad que quiere vivir y educar a su familia, cuando se retorne a la normalidad volveremos con nuevos hábitos, con la reingeniería de costumbres tradicionales, en la amena visita de parientes y amigos, cuando llegue la hora de volver a convivir sin las exigencias que representa un aviso, una llamada, una advertencia, ya basta de tener dolor en la familia, en el medio social de conocidos presentes y distantes ausentes, geográficamente o sin la acostumbrada comunicación, el mundo sigue su curso, no termina, el tiempo se hará cargo para la vuelta a los días de fiestas y jolgorios, basta de muertes por la INCONSCIENCIA de ciertas personas que no piensan , que no razonan, que la insensibilidad le domina, pensemos en nuestros padres, hermanos, hijos, primos, tíos, en la familia que nos rodea cercanamente y los que están lejos y padeciendo también del mal en sus medios. Tener consciencia es voluntad de hacer o no hacer , es deseo, contrario a la conciencia sin “s”, que es moral y personal, volvamos a la prudencia por el bien de todos” LAMBARE, Paraguay, 12-04-2021

sábado, 3 de abril de 2021

La Pandemia en Marcha

El panorama global no es nada halagador, por segundo año consecutivo, sufrimos los golpes, las torturas psíquicas, físicas y financieras con su caudal de silencioso cauce que arrastra vidas, dejando marcas que no desaparecen, acompañan a los vivos con tatuajes fijos que penetran en el alma, en la mente, en los sueños y en el desespero, los que continuamos conviviendo en este caudal que corre al infinito, vemos amigos que lamentamos la partida sin retorno, las familias con sillas vacías en las mesas dominicales, en el interior de las casas las historias de los objetos ya sin dueños, ropas que cuelgan en los roperos como diplomas olvidados, objetos y cosas que se regalan, se lanzan al olvido como materiales sin historias. En los barrios los vecinos se saludan con el rostro de lamentos, las risas tímidas ya no se vislumbran, los espacios son controlados y los desajustados agravian las disposiciones colectivas emanadas de autoridades competentes, estamos creando una nueva sociedad, la sociedad pandémica, debemos inaugurar una nueva ingeniera de comportamiento, de costumbres, de métodos da hacer y deshacer , estamos iniciando la conformación de un individuo y de la familia hoy distanciada, sin cercanía, llegamos distanciados y hábitos a la vía del desuso, esta reingeniería es deshumanizada sin el calor de antes, se extinguirán añejos comportamientos originales e importados, nada queda igual a lo de antes, hoy somos como un robot por imposición de los nuevos tiempos, los vecinos se transformaron en distantes conocidos, ya no existe el antiguo intercambio de culinarias, nos reservamos para compartir entre paredes propios y en silencio, solo se comenta estadísticas de los que partieron como amenazas para los sobrevivientes. Se tienen a varios culpables, se originan opiniones políticas con diversas tendencias ideológicas, surgen nuevas expresiones para la sociedad, separamos en negadores y positivistas , se tienen imágenes de los que lucran con el mal, tenemos a los impotentes para enfrentar el caos, las mentes se volvieron mórbidas, contagian con arrebatos incontrolables, se crearon las fantasías de ídolos que se esfumarán y desaparecerán, los exitosos laboratorios compiten en una rivalidad perversa, los Estados asumen posturas peligrosas por el desconocimiento de los mecanismos, se forman comisiones de consultas sin el adecuado conocimiento, surgen pseudos científicos con espacios en los medios, no pasan de posturas y ambiciones ya direccionadas por apetitos desconocidos, con su banda de aplaudidores, otros se refugian en creencias y símbolos que al parecer parecen y en nada afectar, permanecen en misterios y más allá de la propia razón, y la PANDEMIA CONTINUA su marcha.-