En este momento de dudas, de promesas vanas, la sociedad dividida, angustia en las familias, carencia de vergüenzas en las profesiones, disimulados asentimientos a las
Informaciones, escasa formación de los profesionales y en ese escenario aparece a la vista de la Opinión Pública un CÓDIGO DE ÉTICA que nos presenta el Diario Ultima Hora como” resultado de un largo proceso de discusiones, amplias y participativas de los miembros de la Redacción”.
Lastimo que no se haya buscado entre los dignos profesores de Ética de la Universidad Nacional de Asunción, tenemos profesionales serios, mal remunerados, probos y respetables, que gozan de la consideración y de la estima de colegas y el alumnado, que pena que Ultima Hora no convocara a estos profesionales, trajeron destacados peritos en la materia de otras geografías para presentarnos un Código simple, sumando 21 artículos de Compromiso con la Verdad e Independencia, muy bien elaborado, herramienta valiosa para el ejercicio de la actividad periodística en un marco de respeto, autonomía y clara visión de la responsabilidad social en la transmisión de las noticias, sin mordazas, sin coacciones, sin presión interna ni externa.
Acto seguido, sería interesante trabajar en un marco de salario justo, prestaciones sociales plenas, es bueno recordar que la ética se debilita ante necesidades superiores como el hambre y la enfermedad, y que nuestros periodistas ejerzan su tarea con la convicción de ausencia de censura interna y externa, de las famosas políticas de la empresa, en un ambiente de tranquila y serena paz, con la seguridad de que su familia estará protegida ante una pluma que registra sus ideas, sus sueños, sus anhelos más firmes sin la amenaza de vientos huracanados de la caducidad de un contrato vigente.
Siento una inmensa alegría por esta noticia, es un gran paso, es un logro superlativo, es una llamada de atención a los demás medios de comunicación, un prolongado aplauso
De la sociedad paraguaya ante este dispositivo que pueda transformarse en normas comunes que se debe reconocer y respetar……y ahora un camino para la reglamentación de la profesión de periodista. Y de un espacio del Defensor del Lector.
Oscar B. Llanes Torres
Paraguayo San José, Costa Rica, 1 de junio de 2010
Diplomático y profesor universitario
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