martes, 9 de febrero de 2016

Paraguay Eterno

En estos días recibo de un lector alemán, seguidor de CAMBIO POLITICO, un breve pero muy emotivo escrito sobre las virtudes del PARAGUAY de siempre, hace un relato que conmueve a cualquier paraguayo de cualquier geografía, nos retrata de cuerpo entero, con sus debilidades y su fortaleza, describe con riqueza de detalles su geografía, y el alma del pueblo, su esencia, su postura ante la vida y la muerte, sus curiosidades, su singular estilo del inicio de cualquier relación con el extranjero, sus chispas, sus disimuladas tristezas, sus explosivas alegrías, su diferencia con otras culturas, la extraña combinación y mezcla del guaraní con el castellano, su manera única de saber recibir, sus ofrecimientos tan naturales, su manera especial de ser solidario, su aprendizaje y sus enseñanzas, todo en este suelo llamado Paraguay es muy especial, su mejor patrimonio afirma el alemán es su pueblo, simple, envolvente, risueño, siempre con las manos extendidas al forastero, en la casa encontrará siempre un espacio donde reposar y alimento para el que llega mismo a los denominados “destiempos”, la receptividad con el que se avecina es sorprendente, con naturalidad le expone sus quebrantos e ilusiones, le cuenta de sus sueños y sus infortunios, al instante le hace partícipe de sus novedades y al visitante le hace muy próximo casi intimo en el trato, se exhibe sin reservas le encanta ser visto transparente y amistoso, solidario y bondadoso, cordial y ameno, verlo como gente buena es su objetivo primordial y se transfiere de generación a generación con los mismos compromisos de no crear fisuras en la tradición. Tenemos los paraguayos la convicción de que nuestro mejor patrimonio es nuestra gente, los naturales y los que adoptaron nuestra forma de ser, el paraguayo es un ser especial y único, es simple y soberbio a la vez, no provoques su esencia histórica, tuvimos las tragedias de dos guerras internacionales, alguien ya dice que el paraguayo es muy espartano en sus creencias y muy ateniense en sus amores, el bilingüismo la maneja con destreza, generalmente utiliza el guaraní en sus momentos de euforia y tristeza, el castellano la usa cuando quiere impresionar al interlocutor, con los agregados de ciertos vocablos mal elaborados y es cuando crea un mejor ambiente de humor y gracia que se contagia con gran facilidad, La comunicación con el paraguayo es repleto de símbolos, signos, códigos, una mirada se podrá interpretar de mil maneras, una postura y una conducta es para hacerse conocer, su lenguaje es imperativo por naturaleza, es manso y firme, y como dice el poeta mayor Augusto Roa Bastos, “el paraguayo es un poeta marcial y un guerrero manso”, ama y defiende su realidad, no se mortifica con cuentos extraños a su geografía, le encanta conocer los detalles de otras culturas y civilizaciones, pregunta con sutiles modos, no quiere ser considerado agresivo a pesar de la modulación de la voz impositiva sin ningún rastro de grosería o vulgaridad, es tierna su forma de acercarse al semejante, pregunta con suavidad y un tono ameno, parece esbozar siempre una sonrisa, cautiva sus metáforas en guaraní, ama sus ríos y selvas, las gracias de sus incomparables morenas a quien le ofrece su admiración y entrega su alma sin condiciones, llora con facilidad ante la desgracia del otro, ofrece lo poco que tiene para devolver tranquilidad a un sufrido interlocutor , nunca pregunta de su origen y su destino, el pasado es experiencia, el futuro es desconocido, el presente para conocer y disfrutar, así es mi pueblo, su gente, su rostro moreno con marcas de historias pasadas, cree mucho en mitos y leyendas, algunas de sus creencias parecen infantiles pero es así que somos, así recibimos de nuestros antepasados y así transmitiremos a las futuras generaciones, EL paraguayo ve su futuro siempre con optimismo esperanzador, sabe que a la vuelta de la pagina encontrará nuevas enseñanzas, gozará con nuevos conocimientos, la adaptará con facilidad a su natural entendimiento y con espontánea generosidad la utilidad de lo aprendido, nada en el paraguayo es postizo ni falso, analiza siempre los ojos del extraño, del forastero, del conocido cercano , pues, los ojos según la cultura guaraní el “tesa” (el ojo) es espejo del alma, el te denuncia y no lo puedes esconder los ojos en el paraguayo tiene su lenguaje específico, porque el mismo define tu realidad y tu mentira, el mismo no esconde alegría ni tristeza , tiene brillo u opacidad propia, es la razón porque la mirada para el paraguayo es fundamental, porque independe de la voluntad es un órgano con vida propia. Es así el PARAGUAY ETERNO. Desde Asunción – Paraguay, 9 de febrero de 2016

No hay comentarios:

Publicar un comentario