miércoles, 21 de septiembre de 2016
Incoherencia
El vocablo de referencia del presente material afirma que la “coherencia” que actúa en consecuencia con sus ideas y principios, por lo tanto, lo contrario es la incoherencia, viene a la mente en virtud del comportamiento de personas e instituciones con poca claridad, o ninguna, que sin mediar principios morales o éticos, bases de los valores que rigen en una sociedad civilizada y nada corrupta.
En diversas áreas de la estructura social encontramos procedimientos que no abonan un sentido de buen criterio y probidad que se pueda reconocer, se declaran con más insistencia en el área de los Poderes del Estado, en especial, el Legislativo y el Judicial, sin excluir al Ejecutivo y sus organismos de servicios, donde encontramos las mayores demostraciones de ausencia de transparencia, con intervenciones de ilicitud, de procedimientos turbios, de recompensas y premios por los favores supuestamente ofrecidos y que en muchas oportunidades se obtienen resultados deseados y el ocasional interesado se siente satisfecho por los “beneficios” logrados, son fenómenos comunes en el marco estructural y en los impedimentos que de propósito se instalan para establecer mecanismos de soluciones adaptadas para sortear entre el interesado y el prestador del favor, así funcionan el Estado, ente que no sabemos si es un Órgano o es una Maquina, si es el primero tenemos una entidad donde la voluntad de las personas no interviene y se desarrolla naturalmente, y si optamos por la segunda posibilidad tendremos la obra de un ser humano y por lo tanto perfectible.
Ante la ligera revisión de los comportamientos del Estado, su elemento vital en nuestro tiempo y los anteriores es la política con sus distintas aseveraciones, sus influencias positivas y negativas, sus rostros visibles, sus líderes falsos y verdaderos, que nunca podemos distinguirlos porque están entrelazados y confundidos en perfecta armonía, y el espacio propio de la política es el Legislativo donde se encuentran todas las corrientes de la sociedad, ideas y pensamientos, virtudes y horrores del perfil de sus miembros, escasos son los que poseen el don de la vocación de servicio, de representar con fidelidad el alma de su pueblo, el que lo entiende y hace de su vida un servicio permanente, para estas figuras los aplausos más sonoros, muchos dirán ¿donde están? , y por modestos, nada polémicos, nula publicidad, están ocupando el espacio que la historia le reserva y el reconocimiento perenne de la sociedad que le reserva el sitial único de servidor de su pueblo, existen otros que ocupan sus espacios por la vía de la mentira, el fraude, de negociaciones partidarias perversas y se mantienen actuando en el anonimato delictuoso por la vía tortuosa de oculta y silenciosas actuaciones, sin embargo, goza de una simpatía de los medios que los buscan y exhiben, creando abono fácil para los frutos anhelados, provocando la polémica, los debates, las ofensas, instaurando odios sinceros y ficticios, estableciendo alianzas y cercanías para satisfacer sus nefastos intereses, en donde prevalece la habilidad, la destreza, la palabra fácil para el logro personal generalmente contrario a los intereses generales de la sociedad, y se pierde con facilidad en el anonimato de los registros históricos de la nación y el aplauso de sus pares que los consideran un benefactor, cada probable lector estará viendo y personificando alguien de su conocimiento de estas indeseables pero existentes figuras, que su misión y visión debería ser la COHERENCIA y no lo contrario. Es así, ¿verdad?.-
Desde Asunción Paraguay 21 de setiembre de 2016.-
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