miércoles, 7 de septiembre de 2016

Instante de Reina

Estamos en el año 1968 al inicio de la primavera de aquel año, se gesta en la Facultad Nacional de Medicina de la antigua Universidad del Brasil, en su imponente sede, una construcción del siglo XIX, soberbio y solemne, los estudiantes del segundo año de aquel entonces se reúnen en un espacio poco frecuentado, el salón donde se encuentran los que servirán de modelos para estudios y disecciones, algunos curiosos se acercan disimulados, otros abiertamente interesados, será asunto político, tramando algún movimiento de huelga, cambiar los horarios de exámenes, promover la destitución de algún exigente Profesor, no , nada de eso, están analizando las candidaturas de la Reina de la Facultad Nacional de Medicina de la Universidad del Brasil, tema súper serio en un tiempo de férrea dictadura, ya denuncian a un infiltrado del servicio nacional de inteligencia, las candidatas se disputan un título que marcará historia, los nombres se barajan y surgen los inconvenientes, se ventilan defectos, es gorda o muy delgada, todo, en una de ellas es falso, otra es pésima y desorganizada estudiante, y en ese vaivén sale a la luz y se anuncian los nombres, una de ellas la estudiante del Convenio Cultural, ELOISA LLAMOSA TORALES, paraguaya, de rasgos muy interesante, morena de largos cabellos, de estudiados modales, caminaba siempre como en una pasarela, la otra candidata era brasileña, JULIETA SILVA, bien morena, de cabellos acaracolados, muy elegante y aires de la nobleza etíope, muy apreciada por sus compañeros y muy conocida en la Institución, asimismo, otras de menor calificación, como la que resultara de una humorada de incomparable gracia, bajita, gorda, de anteojos, con su eterna chaqueta de médica, PATRICIA AMOROSO, brasileña de Bahía, que orgullosamente reiteraba en todos los ambientes su condición de nordestina y bahiana, haciendo constantes alusiones a los próceres de aquella región, otra candidata muy interesante es la pelirroja ISABEL MONTEIRO, que llamaba la atención por su espectacular presencia de modelo de academia fisicoculturista, de largos e novedoso corte de cabello, y así desfilaban nombres y atributos, algunas con el exigente consenso otras simplemente eliminada del gusto masculino. Llega la noche del 21 de setiembre, en los salones del Yacht y Golf Club de Urca, zona de la propia Facultad, a la orilla de la playa de Botafogo, cerca del Pan de Azúcar y del sobrio , siempre bien custodiado edificio de la Escuela Superior de Guerra y del Instituto Militar de Ingeniería, la discreta y bonita playa de Urca, no se sabe porque muy poco frecuentada en la época, considero por la presencia de militares en su entorno, no sé, la fiesta se inicia a las 21:00 horas, llegan los músicos de la Orquesta que dirige el Maestro Severino Araujo, la conocida como TABAJARA, con un repertorio espectacular, elegantemente vestidos, se acomodan y comienzan afinar los instrumentos, llegan las familias, los invitados, los estudiantes en su más disparatados atuendos, el salón ya se encuentra en plena agitación, meseros desfilando, la música aumentando los arreglos, voces convocando, ilustrando el protocolo a ser obedecido, la hora marcada 23:00 horas para ingresar al día 22 de setiembre como inicio triunfal de la primavera y la nueva Reina electa para el período de un año de ejercicio de representación y señalando la importancia del cargo a ser disputado, se citan los nombres del jurado compuesto de personalidades famosas, de músicos, cantantes, actrices, artistas plásticos, costureros de renombre, algunas figuras de la “nueva y moderna” televisión brasileña recientemente inaugurada, de escasos y disimulados políticos que pasan desapercibidos y clandestinamente ocupando lugares sin ningún destaque. La hora del voto se aproxima, la fila enorme y ruidosa, la estudiante AURELIA LACERDA, en su tarea de promotora de la Candidatura de ELOISA, persuadiendo con insistencia y agitadas expresiones para determinar cualidades y representatividad, la importancia de la “integración” cultural y un modelo de convivencia pacífica como buenos vecinos paraguayos-brasileños, llega un momento en que el Maestro Severino Araujo suspende la ejecución de la música ante gritos de reclamaciones y otras demandas, ingresan los estudiantes con un enorme tablero, y el jurado con su responsabilidad de elegir la Reina y la que mejor desempeño tenga en la pasarela, todas cumplieron rigurosamente tiempo y ritmo, una belleza de colorido y buen gusto. Se anuncia el resultado y ante las protestas de un grupo y el aplauso y griteríos de otros, resulta electa como Reina de la Facultad Nacional de Medicina 1968-69, la futura Doctora JULIETA SILVA, quedando la paraguaya ELOISA LLAMOSA TORALES en segundo lugar, las expresiones de agravios e insultos de AURELIA LACERDA inconformada y desilusionada de su esfuerzo y su dedicación, ELOISA se hizo de un lado, discreta, bella y en silencio ocupa su lugar y continua la fiesta hasta las cinco de la mañana del primer día de la primavera y nueva Reina.- Desde Asunción – Paraguay , 7 de setiembre de 2016.-

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