lunes, 18 de febrero de 2013
POLITICA Y DIPLOMACIA
En el vocabulario cotidiano, existe una confusión y que no se ajusta a la realidad del ejercicio de cada función, como son la POLITICA y la DIPLOMACIA, dos actividades paralelas que nunca se encuentran a pesar de la cercanía, sus vertientes son muy diferentes y no deberíamos confundirlas, pues, son actividades humanas que exigen entrega, vocación, de mucha pasión, de promesas, dedicada al bien común, la POLITICA, es una actividad que tiene como finalidad la búsqueda del poder, la de gobernar, la de organizar un Estado, su ejercicio proviene de los partidos políticos, de las aspiraciones humanas y de grupos de los más variados segmentos sociales, es una actividad pública y privada, cuando ejercida con la devoción de alcanzar metas y objetivos, de lograr éxitos, de mejorar la calidad de vida de las personas, cuando pública ella es transitoria, la periodicidad es su característica, porque su función la marca el proselitismo en sus propias acepciones.
La política, como función y actividad que obtiene un beneficio personal y lucrativo es sinónimo de indignidad, castigada por el lodo moral, el desengaño, la mentira como fuente de ebullición de ideas y de perversiones en sus más diferentes matices. La política, como actividad exige de sus actores un modelo de entrega que caracteriza a seres preocupados con su entorno, con la felicidad de sus seguidores, por el desarrollo armónico de la sociedad en una marco de respeto mutuo, de solidaridad y bienestar de todos los que componen un grupo humano.
Las empresas privadas también tienen directrices que denominan políticas empresariales a que deben ajustarse sus miembros como un todo, porque su objetivo es el logro de éxitos financieros que debe alcanzar a todos empleados y empleadores, cuando sus propietarios tienen una visión social y humana de la empresa, y cuya política beneficia a la propia sociedad y expande un perfil de reconocimiento colectivo que merece el gratificante premio que otorga la sociedad con su respeto y testimonio que honra y estimula a los exigentes tiempos que vivimos.
DIPLOMACIA, es una de las carreras más fascinantes, tiene encanto y glamur, fascinante por la búsqueda de aspiraciones colectivas sanas y provechosas, es una profesión de las más exigentes porque es una estructura de disciplina, de probidad, de esgrima de pensamientos e ideas, tiene rigor en el control de las emociones , ejercicio de laboratorios mentales permanentes, perseverancia y paciencia, observador constante, cortés y accesible, sereno y prudente, adicto a la palabra escrita y al respeto a las opiniones adversas. La diplomacia es una de las carreras más apasionantes, no es empleo a disfrutar por un período, su misión y visión es el servicio a la colectividad a quien dedica su tarea, es profesión con reglas establecidas, con normas jurídicas propias que le garantizan estabilidad y seguridad, su ingreso es por la vía del estudio y la dedicación, no es por el método fácil del amiguismo y del compromiso partidario, el que escoge este modelo está cometiendo un gran daño a la nación, es propio de sujetos inescrupulosos, vanidosos, incapaces de ubicarse en los que hacen de esta carrera un desafío diario y un destino por una patria mejor.
La diplomacia es servicio no es poder, el poder es un mandato que se conquista con promesas y logros, la diplomacia es un servicio al semejante y a la Nación, al Estado que representa con altruismo, con laboriosidad, con inteligencia, con dignidad, el diplomático pierde su identidad personal para adquirir el de la patria, el es un todo de una parte del Estado que le otorga el prestigio de la representación, que deberá cumplir con altivez, con firmeza, con profesionalismo, con pasión, porque su escenario es un mosaico de contrarios y en ese ambiente deberá relucir el don de una carrera, de una profesión que honrará en cada gesto, en cada palabra, en cada ademán porque ese es su destino, por lo tanto, la periodicidad lastima su esencia y su prestigio.-
San José, Costa Rica, 11 de febrero de 2013.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario